Delegados de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Farc, recibieron en La Habana, Cuba, el paquete de propuestas sobre cómo abordar el tema agrícola como primer punto de la agenda de negociación que avanza con el Gobierno y la Sociedad Civil del país y que continuará siendo debatido a partir del próximo 15 de enero.

Según el equipo negociador de la guerrilla, la mayoría de propuestas deben estar dirigidas a superar el estado de abandono y miseria que se vive en el mundo rural, en especial aquellas que denuncian la falta de vías terciarias, de mercado para los productos agrícolas, deficiencias en el sistema de créditos, en salud, educación o vivienda.

Las Farc también resaltó las propuestas que apuntan a la reubicación y asignación de propiedades a la población víctima del desplazamiento forzado: reincorporar a los campesinos desplazados, que fueron llevados a las periferias de las grandes e intermedias ciudades, reubicándolos en viviendas en concentración subsidiadas, a muy bajo valor y cuotas de amortización mínimas; el retorno de desplazados al campo con garantías de permanencia y rodeados de condiciones políticas, económicas y culturales para que siembren alimentos y garanticen la seguridad alimentaria.

La delegación negociadora de la insurgencia resaltó una serie de propuestas contenidas en el paquete de 11 folios y más de 500 iniciativas, entre las que se encuentra: elevar a rango constitucional el derecho a la tierra, otorgando a cada familia un mínimo vital de tierra de una Unidad Agrícola Familiar (UAF); limitar la tenencia de la tierra a máximo 100 hectáreas; limitar la posesión de tierras por parte de empresas hasta máximo un 10 % del territorio de un municipio; implementar un censo catastral nacional; formalización de la propiedad y adjudicación de parcelas a desplazados; implementar un sistema de acompañamiento a los campesinos con proyectos productivos; eliminar la acumulación improductiva e ilícita de las tierras mediante la aplicación de la figura de la extinción de dominio, la expropiación por vía administrativa y la aplicación de gravámenes para quienes explotan inadecuadamente la propiedad.

Frente a las propuestas consignadas por asociaciones de mujeres, el equipo negociador de la guerrilla resalta propuestas como: fomentar oportunidades para la tenencia de tierra en calidad de propietarias de las mujeres del campo colombiano; otorgar títulos de propiedad a las mujeres cabezas de hogar que viven en el mundo rural. En cuanto al tema de las Zonas de Reserva Campesina, una figuras que más fue comentada durante el foro realizado en Bogotá, se enfatizó en propuestas tendientes a convertir la reserva natural del parque de La Macarena en una zona de reserva campesina; entender esta figura como una zona esencial para el desarrollo agropecuario, ecológico y humano del contexto rural

En lo que toca al sistema de créditos y estímulos para agricultores, la guerrilla resalta: complementar la titulación de tierras con programas de capacitación y asistencia técnica; crear una política de crédito planificado y blando para agricultores; implementar líneas de créditos de bajos intereses y fácil acceso para pequeños y mediano productores.

En una información del diario El Espectador, se señala que en el ítem de educación para el mundo agrario se propone: crear huertos escolar comunitario para que estudiantes, padres y maestros que no posean tierra tengan acceso a alimentos, a la vez que se implementen programas de educación propios de la actividad agropecuaria.